GALICIA

 ya de vuelta de Galicia y con un dolor de posaderas casi como si hubiera hecho el camino de Santiago en bici, en vez de en mi Chiquitín, toca hacer balance. He de decir que ha tenido un poco de todo. Principalmente que me lo he pasado bien y que como siempre que viajo con Cris, nos pasan cosas de lo más surrealista.
Un ejemplo sería el ver una recreación histórica de la II Guerra Mundial, mientras detrás protestan los antitaurinos, en un lateral al lado de los tanques sale una boda y al fondo de la plaza hace la prueba de sonido Ana Belén...o ir a un restaurante y comer en el comedor de una casa...o preguntar a una señora si sabía si había un incendio y enterarnos de toda la gente que tiene en el cementerio...o que nos acaben tocando el 15 de agosto en un aplaza y que tengamos que bailarla mientras mira todo el mundo...
Hemos visto lugares muy bonitos, pero quizá me había creado una idea de Galicia más tipo Irlanda y por eso me ha podido desilusionar un poco, manteniendo lo que he dicho en principio, me lo he pasado bien y he visto sitios muy bonitos.
Tanto a la ida como a la vuelta hemos visto a gente haciendo el Camino...la pregunta es...¿sería capaz de hacerlo? Ayer daba congoja ver a los peregrinos caminado con esta calor horrorosa...